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“Recibirá recompensa”. Si dicha obra soporta el fuego probatorio recibirá el salario de constructor, o sea de enseñador. El buen trabajo será recompensado, el trabajo infiel o inferior será descartado. La recompensa no es la salvación, que la Escritura enseña, sino un premio a la fidelidad en el servicio.
“Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida” se refiere a la recompensa que este constructor pudo haber recibido, no a su salvación. “Como por fuego”. Esta persona tendrá una salida estrecha, como alguien que escapa de un edificio en llamas, perdiendo todas sus posesiones y sólo logra salvar su vida. Aunque el fuego de la Palabra de Dios sin duda alguna quemará las obras impropias, no tocará la salvación del creyente, que está en Jesús.
Nota doctrinal sobre el purgatorio: Los versículos 13 al 15, los ha utilizado la iglesia popular – como ningún otro pasaje- para fundamentar su peligrosa y dañina doctrina sobre el purgatorio (fuego purificador). El cual, dicen, es un estado de castigo temporal, en donde todos los que mueren, no siendo perfectos, deben de pasar por sufrimientos purificadores. Esto puede ser por un tiempo largo o corto, hasta que todo el pecado es purgado. (los novenarios que rezan o las misas que ofrecen, los sacan de allí y los llevan al cielo.
La doctrina engañosa la sustentan en el libro apócrifo de 2 Macabeos 12:39-45 que la iglesia evangélica nunca ha aceptado, junto a otros 8 libros más, a los cuales se les llama también deuterocanónicos (segundo canon) y quieren reforzarla, con este pasaje de 1 Co 3:13-15. Creando una falsa confianza en las personas, de que no van a ir al infierno, sólo al purgatorio, y de allí la familia los sacará, no importando como hayan vivido y cuántos pecados hayan cometido.
“así como por fuego”, al comentar esta frase, la Biblia de Estudio Pentecostal (Pag. 1616) dice que es probable que signifique “apenas salvado”, cuando en el tribunal de Cristo se evalúe a los creyentes. No para declararlos salvos, desde luego, sino para otorgarles sus recompensas (3:14) según la forma como hayan sobreedificado. La Nueva Traducción Viviente (NTV)) lo dice más vívido: “como quien apenas se escapa atravesando un muro de llamas”. Puede observarse que todas son expresiones metafóricas, de las que Pablo era maestro, pues no se trata de un fuego real, sino de la importancia de recibir a Cristo, como el principal fundamento y allí sobreedificar con los mejores frutos, día a día toda la vida, (simbolizada esa edificación con el valor de los metales) para no ser calificado en el tribunal de Cristo (2 Co 5:10) como “apenas salvado”.
En ningún momento está enseñando Pablo que el individuo puede ser “salvo por obras”, sino de que una vez que éste sea “salvo por gracia”, edifique sobre el fundamento que está puesto, el cual es Jesucristo”. (“Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras para que nadie se gloríe” Efesios 2:8,9)
