Jesús bendice a los niños, Lc 18:15-17

Lc 18:16“Mas Jesús, llamándolos dijo: Dejad a los niños venid a mí y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios”.

En otras palabras: no estorben a los niños para que yo los bendiga, facilítenles la llegada hasta donde yo estoy, den paso a las madres con niños en brazos para que crezcan como Jesús, que “crecía en sabiduría y en estatura, y en gracia para con Dios y los hombres” (Lc 2:52). Qué maravilloso es cuando los obstáculos desaparecen y la persona, quien quiera que sea, logra un desarrollo espiritual hasta llegar a “la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto , a la medida de la estatura de la plenitud en Cristo.” Efesios 4:13

Qué privilegio es saber que el reino de Dios pertenece al creyente. El reino de Dios “es un estado inmensurable de bienaventuranzas, no se puede limitar por espacio o tiempo. Es el plan de acción, obrando a favor de los que han de heredar la vida eterna” (Andrade, C., Diccionario Teólogico: Con un Suplemento Biográfico de los Grandes Teólogos y Pensadores. Patmos, 2002, pag. 267). “Los niños espirituales” son los que tienen este gran regalo de parte de Dios.