Parábola de las diez minas, 19:11-27

Lc 19:20-21“Vino otro, diciendo: Señor, aquí está tu mina, la cual he tenido guardada en un pañuelo; porque tuve miedo de ti, por cuanto eres hombre severo, que tomas lo que no pusiste, y siegas lo que no sembraste".

Aparece en escena un tercer siervo el cual era diferente a los primeros dos. El relato dice que vino otro siervo (Gr. éteros, uno de una clase diferente en comparación a los primeros dos) y le devolvió a su Señor lo que era suyo. No puso a trabajar el dinero que se le había confiado por temor a su amo porque, según él, era un hombre severo que exigía más de lo normal. Tampoco quería correr el riesgo de perder el dinero que había recibido y, por lo tanto, prefirió guardarlo en un pañuelo.

Para meditar: Este tercer siervo representa a la clase de creyentes hoy en día que por tener miedo, no se atreven a ejercitar los dones que poseen o cumplir con las tareas que conllevan riesgos, aun al costo de sus propias vidas. Pero como sucede en la parábola, el reproche del amo hacia estos creyentes modernos, es precisamente que no teman de correr riesgos y lograr que la inversión de tiempo, vida y dones produzcan el debido fruto.