Mateo 2:12 “Pero siendo avisados por revelación en sueños que no volviesen a Herodes, regresaron a su tierra por otro camino”.

El plan de Herodes marchaba a las maravillas. Ahora todo era sencillo, los magos regresarían contentos, los despediría rápidamente al oriente y él podría ya sin el estorbo de estos sabios tan devotos, encaminar sus pasos a Belén para destruir al que osaba amenazar su reino. No había forma de que su plan fallase.

Pero no contaba con dos cosas fundamentales, Dios cuidaba de su Hijo, como cuida de sus hijos hoy en día todavía, y envió un aviso a los magos para que no regresaran a Herodes. Y segundo, la sensibilidad y obediencia de los magos a los sueños recibidos que fue pieza clave en la salvación del pequeño Jesús. Seguramente estos hombres no entendían mucho de qué se trataba, pero fueron sensibles y cumplieron la encomienda de retirarse sin ser vistos por el rey.

Para Meditar: Completamos así una imagen de la verdadera adoración a Dios revelada en la historia de los magos, diligencia en investigar su Palabra, disposición a buscar su verdad; adoración física, entrega de todo lo que tenemos, sensibilidad y obediencia absoluta a la dirección divina.

Nota Doctrinal: El Señor a través de su Palabra relata muchos episodios en los cuales se comunica mediante sueños y revelaciones. A la fecha lo puede seguir haciendo; sin embargo, los creyentes deben estar firmes en su dependencia de la palabra, la sola Escritura, y conscientes de que ella se interpreta a sí misma, por lo cual hay certeza de ir por un camino correcto al dejarse guiar por ella, ya que es lámpara a nuestros pies. (Sal 119:105; Jn 16:13).