Todo el día había estado a la orilla del mar enseñando por parábolas, era el momento de partir a la región pagana de Gadara. Aplicar lo que había enseñado, mostrar que el reino de Dios es tan poderoso, que las tormentas, los endemoniados y la muerte le obedecen. Esta sección de milagros abarca de (Mr 4:35-5:43). También era necesario que fuese a predicar a los gentiles de esta región y que los discípulos reconocieran a Jesús como el Mesías de Dios.
De los tres evangelios sinópticos sólo Marcos precisa el momento del día cuando se fueron en la barca, indicando que fue al llegar la noche.