Mateo 5:29-30 - “Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo, y échalo de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno. Y si tu mano derecha te es ocasión de caer, córtala, y échala de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno.”

Los versículos 29 y 30 son una metáfora que sirven bien para ilustrar la necesidad de abstinencia como prevención del pecado. Desde luego estas palabras no deben tomarse en forma literal y deben interpretarse desde una perspectiva ilustrativa sobre las indicaciones del Maestro. De estos versículos podemos extraer lo siguiente:

1. En un mundo cada vez más influenciado por el pecado, las oportunidades de caer en tentación cada vez son mayores debido a sus distintos disfraces. “Ocasión de caer” aparece dos veces en estos versículos, y en el texto original (skándalon)5 denota las cualidades de una trampa puesta para atrapar a los animales desprevenidos.
2. La abstinencia de algunas cosas o situaciones, siempre es preferible que el exceso de confianza en sí mismo, sobre todo si no se ha alcanzado la madurez cristiana.
3. Estar atento ante las trampas del pecado es una responsabilidad personal y la escritura nos exhorta a estar atentos sin importar cuan seguros nos sentimos (1 Co 10:12).

5 Pablo Hoff, Se hizo hombre, Pág. 113