Jesús anuncia la negación de Pedro, Lucas 22:31-34

Lc 22:31-34“Dijo también el Señor: Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo; pero yo he rogado por ti, que tu fe no falte; y tú, una vez vuelto, confirma a tus hermanos. Él le dijo: Señor, dispuesto estoy a ir contigo no sólo a la cárcel, sino también a la muerte. Y él le dijo: Pedro, te digo que el gallo no cantará hoy antes que tú niegues tres veces que me conoces".

El anuncio de la negación de Pedro sólo se registra por Lucas quien a la vez omite el anuncio de Jesús de que todos los discípulos se escandalizarían y dispersarían por causa de él (Mt 26:30-32; Mr 14:26-28). Esta experiencia triste de los discípulos pero especialmente del apóstol Pedro, Lucas la atribuye específicamente a un ataque directo de Satanás contra ellos. Observemos que al decir el Señor a Pedro “Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo” él emplea primero el plural “os” (Gr. Hymas, vosotros) refiriéndose a todos los discípulos en contraste con Pedro a quien se dirige (v. 32) por el singular “tu”.(la Biblia NVI dice: “ha pedido zarandearos a ustedes, como si fueran trigo”) El pensamiento detrás de estas palabras es que Satanás quería probar que, al menos, algunos de los discípulos fracasarían bajo una prueba severa. La metáfora empleada en la expresión “zarandearos como a trigo” implica la separación de lo deseable de lo que es indeseable. La repetición del nombre “Simón, Simón” es una figura retórica llamada “episeuxis” que consiste en repetir una palabra para dar énfasis. La repetición del nombre Simón añade peso a la amonestación de Jesús a Pedro.

Por su parte, Jesús, ante esta prueba de fuego por la cual atravesarían los discípulos, les anticipa que había rogado al Padre, especialmente por Pedro, para que su fe no faltara, es decir, que no desaparezca completamente como el sol en un eclipse total. La oración de Jesús por Pedro fue respondida y a pesar de haber negado al Señor, Pedro se restauró y en lugar de quedar descalificado en su servicio al Señor, nuevamente asumió sus responsabilidades como líder del grupo a fin de confirmar en su fe a sus hermanos (1 Pedro 5:10).

Los versículos 33 y 34 registran las palabras de Pedro que revelan un exceso de confianza en sí mismo que lo llevó a negar a Jesús, al igual que registran las palabras de Cristo que anuncian la negación de Pedro.