El joven rico, Mr 10: 17-34 

Mr 10:18 “Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino sólo uno, Dios.” 

El maestro (didaskalos) le respondió nuevamente con una pregunta ¿Por qué me llamas bueno? (agathos: generoso, de excelencia moral). Con su respuesta, El Hijo de Dios no estaba negando sus atributos, por el contrario, estaba afirmando su procedencia divina.