El uso que Jesús hace de las parábolas, Mr 4:33,34 (Mt 13:34,35) 

Mr 4:33-34 “Con muchas parábolas como estas les hablaba la palabra, conforme a lo que podían oír.  Y sin parábolas no les hablaba; aunque a sus discípulos en particular les declaraba todo”.   

Es fascinante como Marcos presentaba las parábolas sobre sucesos reales en el campo agrícola enseñadas por Jesús, con un lenguaje común para que las multitudes y sus discípulos pudieran comprender mejor cómo es el reino de Dios. Para los judíos el reino de Dios era incomprensible, inimaginable, pues ellos trataban de entender en base a su lógica humana, un reino terrenal, que les defendiera de la opresión de los pueblos vecinos.

Jesús, conociendo todas las cosas, sabía que no podían comprender las verdades espirituales porque aún el Espíritu Santo no había venido a ellos. “Aún tengo muchas cosas que deciros, pero no las podéis sobrellevar, pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda verdad” (Jn 16:12,13) Sin embargo, a sus discípulos en privado les explicaba todas las cosas.