La declaración que hace Jesús desata la furia de los líderes religiosos al grado tal de querer apedrearlo basados en lo que la ley determinaba ( Lv 24:16), la petición que le hacían que declarara su origen, en versículos anteriores, hoy es el motivo para declararlo blasfemo, indudablemente que las obras de Jesús habían sido buenas porque cambió la vida de los receptores, el término obras, se refiere a cosas sobrenaturales con el propósito que estas apuntaran a Jesús como Hijo de Dios, pero no había nada que los convenciera que Jesús era Dios. Jesucristo tuvo que huir de la furia de sus acusadores porque aún no había llegado su hora, no porque temiera a morir, él estaba dispuesto a hacerlo porque a eso vino, pero el plan ya contemplaba la forma y el tiempo como sería, en el tiempo de Dios no el de los hombres.