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Muerte de Lázaro Jn: 11:1-16
Jn 11:11-16 "Dicho esto, les dijo después: Nuestro amigo Lázaro duerme; mas voy para despertarle. Dijeron entonces sus discípulos: Señor, si duerme, sanará. Pero Jesús decía esto de la muerte de Lázaro; y ellos pensaron que hablaba del reposar del sueño. Entonces Jesús les dijo claramente: Lázaro ha muerto; y me alegro por vosotros, de no haber estado allí, para que creáis; mas vamos a él. Dijo entonces Tomás, llamado Dídimo, a sus condiscípulos: Vamos también nosotros, para que muramos con él”
Una vez que les ha dicho que es tiempo de trabajar, Jesús se refiere a Lázaro como su amigo, philos. Ese es un adjetivo usado para referirse a un ser querido o a un amigo afectuoso. Cuando se transforma en verbo, se refiere a un amor de amistad y muestra mucha afinidad entre dos personas.
Nuestro amigo Lázaro duerme; mas voy para despertarle, en la antigüedad el sueño , era como una figura de la muerte, esto tiene que ver con la apariencia que la persona tiene cuando fallece, la cual parece estar dormida, este término es menos fuerte e impacta menos a los dolientes (Mt. 9:24).
Ya en el Nuevo Testamento el término sueño, se menciona como sueño físico cuatro veces, y como muerte física catorce veces. Es tan fuerte la relación de estos dos significados que al lugar donde son sepultados los muertos se le llama cementerio, que proviene del griego: lugar de los dormidos.En diversas ocasiones los discípulos de Jesús caían en el error de tomar las palabras del Maestro de forma literal cuando hablaba con metáforas o parábolas como es en este caso lo relativo al sueño.
Los discípulos toman de forma literal que Lázaro dormía porque el mensaje que escucharon fue que estaba enfermo, y era natural que una persona en ese estado durmiera, pero el Señor que todo lo sabe al darse cuenta de esta confusión les declara abiertamente que su amigo había muerto.
11:15 “y me alegro por vosotros, de no haber estado allí, para que creáis; mas vamos a él”.
Lo que sin duda trae confusión a los discípulos es que el Maestro se alegrara ante un hecho semejante, Juan señala que el motivo de tal emoción fue porque fortalecería la fe de ellos, hasta estos momentos tal vez los discípulos tenían fe para creer que Jesús tenía la manera sobrenatural de saber que el peligro había pasado y Lázaro dormía físicamente.
Asimismo, que interesante que a estas alturas el Señor seguía interesado en mover a sus discípulos a un nivel de mayor madurez en su fe, ese era el motivo de su alegría, no por la situación por la que atravesaba la familia de su amigo. Lo que sucede en la vida del seguidor de Cristo, cuando constantemente se presentan circunstancias que permiten crecimiento; ellos ya le habían pedido en otra ocasión que les aumentara la fe (Luc. 17:5), ésta era una muy buena oportunidad para que crecieran.
Se considera que este es el milagro más preparado, ya que sería un curso de capacitación para los discípulos de Jesús, pero a la vez se cumplía el propósito de glorificarle a Él y al Padre, de ahí la confianza al decir vamos a él, hablando como si estuviera vivo, nunca mencionó la intención de ir a consolar a la familia, estaba seguro de lo que estaba por suceder: la resurrección física de su amigo.
