La alusión que presenta el verso “a Timoteo, verdadero hijo en la fe” nos hace pensar en la idea de pseudo discípulos de este predicador; Timoteo era un colaborador activo en el ministerio del apóstol de Tarso; oriundo de Listra (Hch 16:1-3), que a su vez pertenecía a la provincia de Galacia en la zona centro sur de Asia menor; a éste le habría conocido entre el 45-48 d. C.; a su vez había emprendido el viaje al lado del apóstol Pablo (Hechos 13:49-14:25), y de él había recibido la amistad y mentoreo como padre espiritual (Ro 16:21; 1 Co 4:17; 16:10; Fil 2:22; 1 Ti 1:2 y 2 Ti 1:2).

La trifecta que aparece en la escritura: “Gracia, misericordia y paz” es parte del estilo salutatorio cristiano del primer siglo, que Pablo usa con frecuencia en sus epístolas, lo cual vendría a ser uno de los argumentos que posiciona esta carta dirigida a un discípulo selecto, como un documento temprano de la iglesia primitiva, así como de la paternidad paulina.