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Tras la exhortación general a luchar contra el amor propio y contra el egoísmo y a llevar incluso exteriormente una vida ejemplar, comienzan ahora las exhortaciones a ser conscientes de la autoridad del Estado. Por causa del Señor, es el punto. La conducta rebelde de un creyente trae deshonra y descrédito a Cristo.
“Por causa del Señor someteos a toda institución humana, ya sea al rey, como a superior, 14 y a los gobernadores, como por él enviados para castigo de los malhechores y alabanza de los que hacen bien”.
Durante su paso por el mundo bajo las leyes humanas y la autoridad civil, el pueblo de Dios debe vivir de forma humilde y sumisa en medio de cualquier sociedad impía, hostil y calumniadora.
• Compárese esta exhortación
• con las del AT, Proverbios 24:21; Jeremías 29:4-14
• Con el evangelio, Mateo 22:21
• Con las cartas de Pablo, Romanos 13: 1 ; 1 Timoteo 2:1,Tito 3:1
• Con Hebreos 10:32-34
Gobernadores. Esto se aplica a toda institución que mantenga el orden civil y social en la tierra, desde el gobierno nacional, hasta los Estados con sus jueces y policías. Solamente cuando se obligue a hacer algo contrario a la ley de Dios, que se prohíba en las Sagradas Escrituras, es cuando existen modelos bíblicos y recomendaciones para no hacerlo: Hechos 4:18-20;5:28,29; Tito 1:6; 3:1,2
