El apóstol Pablo hace referencia a la misión de la iglesia en este mundo con respecto al misterio revelado y ministerio conferido por el Señor. Ya que estando el apóstol encarcelado, la iglesia tenía que seguir haciendo frente a la lucha contra principados y potestades, reconociendo que Jesucristo estaba con ellos y que ante su nombre todo principado y potestad se sujetaba bajo sus pies.

Para ello, les hace notar que la multiforme sabiduría de Dios estaba presente en sus vidas para tomar sabias decisiones y seguir encaminados a cumplir con el propósito eterno del Señor Jesucristo; aquí la palabra multiforme viene del griego polupókilos que significa grande diversidad, es decir Dios estaba dispuesto a brindarles la abundante gracia y la completa seguridad para seguir proclamando su nombre, como una iglesia dotada.

El acceso que Cristo Jesús había logrado para recibir las bendiciones de parte de Dios tenía que ser un elemento que no podrían olvidar. Qué Cristo como cabeza de su iglesia les daría confianza por medio de la fe en El, para hacer las obras de Dios en la tierra en medio de un mundo lleno de pecado y dominio por el enemigo. Posiblemente al mencionar a los principados y potestades en los lugares celestiales, se refería a los poderes que gobiernan la oscuridad de la región espiritual (Ef 6:12; Daniel 10:13,20-21). Aunque la primera interpretación es que se refiera a los ángeles buenos (Col 1:16), los cuales contemplan la asombrosa sabiduría que Dios demuestra por medio de la iglesia (1 P 1:10-12) (B. de estudio pentecostal Pág. 1688)

El apóstol Pablo les pide que no desmayen, que sigan adelante en el camino del Señor, que las tribulaciones que él mismo ha pasado deben ser un ejemplo y un estímulo para ellos, a fin de seguir predicando a Cristo sin ningún temor.

Para Meditar

Entender que Dios ha dado una multiforme sabiduría a la iglesia suena complicado, porque nuestra mente finita no alcanza a comprender la mente infinita de Dios. Sin embargo, por ser su iglesia nos ha dado las herramientas necesarias para seguir proclamando el nombre de su Hijo Jesucristo, brindándonos el acceso a tales bendiciones, para que tengamos la seguridad de que su poder se manifestará en nuestras vidas.