LBC Menú
Capítulos:
Los creyentes romanos han sido transferidos a un estado de libertad, el efecto lógico era que en un acto decisivo entregaran todos los miembros de su cuerpo para ofrecerlos en servicio a una ética moral justa revelada por Dios. Quedaba claro que el recién convertido no podía servir a dos señores. Por lo antes expuesto, parafraseando a Karl Barth, “asimismo antes eran libres, esto es, de la justicia, una terrible libertad, de la cual el resultado inevitable y vergonzoso, y el fruto era la muerte, porque se han vuelto siervos de Dios, con el resultado de que, por la decisión de él, ustedes son hombres santificados, quienes por tal razón van en camino a la vida eterna”.
Según Justino Mártir, el mundo romano no conocía la moralidad, el Páter familia podía rechazar a sus hijas recién nacidas, éstas eran abandonadas en un lugar público conocido como el foro, en donde hombres depravados las recogían para más adelantes comerciar con ellas en los burdeles. Eran muchos los casos en que coincidían el padre y la hija en dichos lugares.