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Lucas con esa finura que tenía al escribir va narrando como los acusadores habían llegado, hablado mucho, pero no habían dicho nada sustancioso, nada que acusara a Pablo de algún delito.
“Tenían contra él ciertas cuestiones acerca de su religión”, del griego deisidaimonias, que se tradujo originalmente “temor de los dioses”, después superstición y la RVR60 lo traduce como religión. Algunos escritores creen que Festo utilizó esta palabra para hablar ambiguamente sobre una creencia que pudiera ser verdad o mentira, como dejando al aire su propio juicio.
No cabe duda Dios utilizó medios inimaginables para que el evangelio llegara hasta nuestros días, y para que los gobernantes, principales autoridades, y el emperador romano supieran que ese Cristo que habían crucificado vivía, que había resucitado y enseñado la gloriosa esperanza que un día todos los que creyeran en él también resucitarían para vida eterna. Para los romanos y griegos era algo irreal lo de la resurrección, pues sus dioses no resucitaban personas, ni hablaban de una vida eterna, así que se burlaban del pensamiento de la resurrección
Festo le platica a Agripa II de sus dudas acerca de las cosas que decían, por eso le había pedido a Pablo que fueran a Jerusalén y allá lo aclararan, pero Pablo había decidido ir a hacerlo del conocimiento de Augusto. Esa era la voluntad de Dios que Pablo predicara a gentiles reyes y judíos (9:15)
El emperador Octavio César, fue el primero en usar el título de Augusto que traducido es “reverendísimo” y que fue copiado por los sucesores ,en la Biblia se menciona a Augusto César (Lc 2:1) y a Nerón (25:21,25).
Otro título que se les daba a los emperadores romanos era César desde el siglo I d.C. proveniente del sobrenombre de la familia romana Julia, herederos de Julio César. Jesús nace en tiempos de Augusto César quién gobernó del 30 a.C. al 14 d. C, (Lc 3:15) la vida pública de Jesús se dio bajo el gobierno de César Tiberio del 14 d.C. al 37 d.C. Luego siguieron Calígula 37 d. C. a 41, Claudio del 41 d.C. al 54 d.C. (11:28; 18:2), y Nerón del 54 d.C. al 68 d. C. que gobernaron cuando la iglesia se propagó. (Hechos 25:10,11, 21; 26:22; 27:24; 28:19; Fil 4:22).