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La predicación de Pedro esta estructurada en cuatro puntos A. La fundamentación en el Antiguo Testamento (2:16-21) B. Presentación del Mesías resucitado (2:22-28) C. La confrontación de los hechos con el A.T. y los testigos oculares (2:29-35) D. Llamamiento al arrepentimiento (2:37-40). Esta predicación era conocida por los primeros cristianos como el kérygma
En la iglesia primitiva se dieron cuatro tipos de predicación:
1.- Kérigma, que quiere decir anuncio de pregonero, en ésta el predicador exponía los hechos reales y palpables del evangelio que no se podían negar ni discutir, como sucedió en el sermón de Hechos 2:14-41.
2.- didajé que quiere decir enseñanza, ésta aclara y desarrolla el significado y las implicaciones de los hechos que se han proclamado. Sería como dar la respuesta después de proclamar los hechos incontestables. Se usaba para explicar las instrucciones necesarias a los nuevos creyentes para su crecimiento y madurez espiritual.
3.- paraklésis que quiere decir exhortación. Palabras de consuelo y ánimo que presentaban a los oyentes el deber de recapacitar en la enseñanza que se les había dado.
4.- homilía que quiere decir el desarrollo de un tema a la luz del Evangelio. Una predicación que explica de manera detallada un tema de basado en un texto de la biblia.
(Comentario Biblico W. Barclay Hechos pag. 18)
Una de las características del libro de Hechos, es que el escritor Lucas, menciona los discursos de los protagonistas principales: A saber, los de Pedro en los Caps 1, 2, 3, 4, 5, 10, 11 y 15; el de Gamaliel, Cap. 5, el de Esteban, Cap 7; los de Pablo, en Caps 13,14,17, 20, 28 y sus discursos de defensa 22,23,24 y 26.
Pedro con valor y autoridad, como el portavoz del grupo, se levantó con los once; incluyendo a Matías el sucesor de Judas. En sábados y en fiestas solemnes los judíos no comían, ni bebían nada hasta después de la oración matutina de las nueve de la mañana.
Lo mismo que Lucas había explicado sobre el derramamiento del Espíritu Santo, Pedro lo dice a la multitud, primero justifica el actuar de los ahí congregados, aclarando que no han tomado mosto (vino dulce), ya que era muy temprano para estar bebiendo. Debe de haber sentido tanto gozo, de experimentar lo dicho por el profeta Joel 2:28. No se estaba cumpliendo toda la profecía, pero el derramamiento del Espíritu Santo sobre toda carne, había llegado.
El derramamiento fue para “toda carne” lo que incluye hijos e hijas que podían ser menores de edad, jóvenes, ancianos, siervos y siervas; no había distinción de edad, sexo o nivel social, la llenura con el Espíritu Santo era para todos. “Y el que invocare el nombre del Señor será salvo”, el concepto más importante que debían entender los que se habían acercado a escuchar.