LBC Menú
Capítulos:
El tiempo del juicio ha llegado y Dios les ordena a dos ángeles usar su hoz afilada para recoger dos cosechas totalmente distintas. La primera siega o cosecha es para recoger de la tierra a quienes le pertenecen al Señor y en este tiempo ya se ha completado el número de los sabios y entendidos. En esta cosecha son reunidos todos los redimidos de todas las naciones de la tierra (Mt. 13:36-43).
Luego se ordena al segundo ángel meter su hoz para recoger la segunda cosecha. (la hoz era un instrumento con mango de madera y una cuchilla tajante y curvada hecha de hierro, que se usaba para cortar el grano o la paja. Leer la nota al final). Lo terrible es que el fruto de esta cosecha no es de premiación, sino para que la cosecha sea echada en el lagar de la ira de Dios. Aquí se utiliza el ejemplo de las uvas cuando son echadas en el lagar para ser pisadas, aplastadas y así extraer su jugo. Lo único que de este lagar no sale el jugo de la uva, sino sangre. Representa el dolor y sufrimiento de aquellos que han rechazado al Cordero.
El ángel encargado del fuego, es decir el fuego del juicio, vino del altar donde se ofrece el incienso y las oraciones de los santos (8:3). Este mismo incensario es llenado con fuego y arrojado a la tierra (8:5) como un preludio a las siete trompetas. Las uvas de la ira significan que el tiempo que Dios considera para la segunda venida del Cordero ha llegado. El ángel encargado del fuego ordena al ángel con la hoz que recoja las uvas porque están maduras. El hombre ha provocado la ira de Dios hasta lo sumo (Joel 3:13).
El relato bíblico nos dice en Jud 2.10 “Y toda aquella generación también fue reunida a sus padres. Y se levantó después de ellos otra generación que no conocía a Jehová, ni la obra que él había hecho por Israel.” La consecuencia de esto fue el mal comportamiento de todo un pueblo en un tiempo y un espacio, o sea de toda una generación que convivió y socializó en su cotidianidad, pero se olvidó de los mandamientos de Dios, en este sentido, es bueno recordar lo que el salmista nos dice “Generación a generación celebrará tus obras, Y anunciará tus poderosos hechos (Ps 145:4). Aprendamos la lección, cada generación tiene la responsabilidad delante de Dios para cumplir los mandatos descritos en su palabra. La iglesia es la responsable directa de ganar a su generación para el Señor Jesucristo, siempre deberá ser así.
20 Y fue pisado el lagar fuera de la ciudad. Algunos comentaristas lo consideran una alusión al Señor Jesús crucificado fuera de la ciudad (He. 13:12). Para otros es una alusión a las leyes de purificación, donde el impuro era expulsado fuera del campamento (Lv. 8:17; 9:11). Sin embargo, puede referirse a la reunión de todos los enemigos de Dios en los alrededores de la ciudad de Jerusalén (Sal 2:2, 6; Dn. 11:45; Joel 3:12-14; Zac. 14:1-4). Recordar que el mismo Esteban fue apedreado fuera de la ciudad (Hechos 7:58), Pablo experimento los padecimientos por causa del nombre del señor, y en cierta ocasión lo sacaron casi muerto fuera de la ciudad. Ahora toca a los malos ser castigados “fuera de la ciudad”.
y del lagar salió sangre hasta los frenos de los caballos, por mil seiscientos estadios”.
El lagar de la ira de Dios será la llanura de Har Meggido (Armagedón), donde tendrá lugar la final y más brutal batalla que jamás haya conocido la humanidad. Eso será realmente una intervención de Dios, la misma Escritura lo define como el más importante de sus juicios sobre esta tierra. Al sitio también se le conoce como la planicie de Esdraelón, el valle de Josafat (Joel 3:12) o el valle de la decisión (Joel 3:14) que fue un lugar de grandes enfrentamientos en los días del AT (Jueces 5: 19; 2 R 23: 29).
La severidad de la matanza, hace que la sangre salpique a más de un metro de altura, porque alcanza a teñir de rojo los caballos que se utilizan. Este acontecimiento se menciona ampliamente en Apocalipsis 19:11-21. Es posible que en Ezequiel 39:8-16 se describa el proceso de limpieza. La distancia aproximada desde Armagedón en el norte de Palestina hasta Edom en el Sur es de unos 290 km. “mil seiscientos estadios”. La gran batalla se librará a lo largo de toda es área (B. MacArthur p. 1867).
Lagar: lugar donde se exprimen las uvas para sacarles el jugo. Se construían de diversas maneras, pero en Israel la mayoría de los lagares encontrados por los arqueólogos eran excavaciones en el piso de roca, en cuyo fondo se dejaba un orificio o un pequeño canal por donde habría de salir el jugo. Se echaban las uvas en la excavación y una o varias personas se subían encima de ellas, pisándolas y triturándolas con los pies. En esa forma el jugo caía por gravedad a recipientes que se ponían al final del orificio o canal de desagüe. A esa actividad se le llama “pisar el lagar” (Jr. 25:30). indiscutiblemente símbolo de juicio.
Conclusión: Estos 144.000 son el cuerpo de élite que estará más cerca de Cristo de entre todos los salvos de todos los tiempos por toda la eternidad. Son también parte de la élite del ejército del Señor que peleará contra la bestia cuando Cristo en gloria regrese a la tierra (Ap. 17:14; 19:14, 19).
El Cordero, junto a sus 144.000, después de esperar de pie en el Monte de Sion celestial (14: 1), ya desciende a efectuar el juicio sobre los malos en la tierra, esto es el Armagedón, (la montaña de Megido) el lugar geográfico de la última y más terrible batalla, será, no solamente el lugar propiamente dicho y la batalla mencionada (16: 16), sino, en realidad, una guerra a nivel mundial (Jr. 25: 29-38), y que se efectuará al final de los últimos 42 meses o tres años y medio de esa semana de años final (Dn. 9: 27), y que finalizará con la venida del Señor Jesucristo. Dios reunirá a todas las naciones para efectuar Su juicio sobre todas ellas.
El ilustre pensador Watchman Nee opinaba que después de la siega y de la vendimia, seguía la fiesta de los Tabernáculos, que es un tipo del reinado en el Milenio.
