LBC Menú

Capítulos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:

Versículos:



Mateo

Marcos

Lucas

Juan

Hechos

Romanos

1 Corintios

2 Corintios

Galátas

Efesios

Filipenses

Colosenses

1Tesalonicenses

2Tesalonicenses

1Timoteo

2Timoteo

Tito

Filemon

Hebreos

Santiago

1Pedro

2Pedro

1Juan

2Juan

3Juan

Judas

Apocalipsis

Apocalípsis

Apocalípsis 5:1 “Y vi en la mano derecha del que estaba sentado en el trono un libro escrito por dentro y por fuera, sellado con siete sellos.”


El capítulo anterior se centra en la adoración al Creador y éste en la adoración al Redentor. Sin embargo, son parte de la misma escena en la que el aspecto que se destaca y que aporta contenido escatológico, es el momento en el que el cordero inmolado se acerca frente al que está sentado en el trono y recibe el rollo sellado con siete sellos. Este pasaje tiene paralelo en la visión de Daniel (Dn 7:13,14).


En la mano derecha de Él, -un antropomorfismo (forma humana) que simboliza su poder y autoridad- un libro (biblon en griego) escrito por dentro y por fuera. Los comentaristas concuerdan que los libros aparecieron hasta el siglo II d.C., así que lo más seguro es que era un rollo lo que tenía en la mano. La Biblia NVI (Nueva Versión internacional, confirma lo anterior al escribir Ap 5:1 así: “En la mano derecha del que estaba sentado en el trono vi un rollo escrito por ambos lados y sellado con siete sellos).


Los rollos estaban formados por largas tiras de hojas de papiro de 47 x 22 cm. (19x9 plg.) que se unían horizontalmente hasta alcanzar la longitud deseada. Otros se hacían de piel, en tiras, llamadas pergaminos, que estaban unidos a un rodillo de madera por cada extremo y que podían llegar a medir hasta cinco metros. Se sostenían con la mano izquierda y se iban enrollando en uno de los rodillos y desenrollando del otro a medida que se leían.

Nota Histórica

El papiro es una planta que crece en el río Nilo, tiene troncos que llegan a medir cinco metros de largo, de su corteza se sacaban tiras delgadas, que se sobreponían en forma vertical y horizontal. Se mojaba con agua del Nilo y se aplastaban, más o menos como la técnica del papel amate en México. De esa forma obtenían las hojas de papel que luego alisaban con piedra pómez. El lado donde las fibras quedaban horizontalmente y era fácil la escritura se le llamaba recto y se llamaba anverso al lado donde las fibras iban en forma vertical y se dificultaba la escritura. Como el papiro era caro y solo en Egipto se producía, si se tenía que escribir mucho se utilizaba por los dos lados; lo que se escribía por el reverso se le conocía como opistógrafo, es decir una hoja escrita por detrás.


El rollo que vio Juan tenía dos características:


  1. “Escrito por dentro y por fuera”. Esto era inusual en el mundo antiguo por la dificultad de escribir por el reverso del papiro, aunque en la Biblia se mencionan rollos escritos por los dos lados (Ez 2:10; Zac 5:3). El rollo del que habla Juan estaba completo, no había que agregar ni una jota ni una tilde (Mt 5:18). Dios tiene el control sobre la historia y el destino del hombre y de toda su creación.
    ¿Qué contenía este rollo? Ninguna porción de la escritura dice que fuese abierto o leído, sino que los sellos fueron abiertos sucesivamente, dándose a conocer su contenido como un todo completo y perfecto, que se conocerá hasta que sucedan todos los eventos. Algunos comentaristas dicen que se refiere al rollo con endechas, lamentaciones y ayes —escritos por delante y por detrás— que Dios le mostró a Ezequiel (Ez 2: 9-10). El libro que vio Juan predecía las lamentaciones, pero también revelaba el plan perfecto de Dios para juzgar y redimir a su creación, que culminará al final de los tiempos.
  2. “sellado con siete sellos”. Al estar sellado su contenido sólo podía descubrirse, una vez revelados los siete sellos. Este libro o "rollo", era el formato que se usaba para los documentos importantes en la antigüedad, lo que representa este "libro" es el nuevo pacto de Dios con Israel. Siglos antes, el profeta Jeremías escribió: “He aquí que vienen días, dice Jehová el Señor, en los cuales haré nuevo pacto con la casa de Israel, y con la casa de Judá”. Jer 31:31 Este nuevo pacto iba a escribirse no sobre unas tablas, sino sobre sus corazones. Desde el libro de Génesis 1 el número siete simboliza la perfección, por tanto, el rollo estaba perfectamente sellado. Katesphragismenon palabra griega que se traduce sellado, el prefijo κατά del compuesto intensifica el significado del participio. Es el sentido perfectivo de la preposición, «completamente sellado».1
    La palabra sphragisin significa: sello y puede referirse a la marca estampada por el sello en sí (5:1, 2, 5; 2 Ti 2:19) Esta misma palabra se menciona 13 veces en el libro de Apocalipsis y 16 veces en todo el Nuevo Testamento. El verbo relacionado Sfragízo significa: estampar con un sello para asegurar o guardar el secreto de algo. Los sellos eran manchas de cera caliente que se presionaba con el anillo del propietario y de los testigos, ubicado donde el rollo o el libro debía de ser abierto.
    En el libro del profeta Jeremías (32:9-15) se encuentra la narración sobre un documento que se escribió dos veces: uno sellado con siete sellos y otro sin sellos que podía leer, este era el procedimiento en el mundo antiguo. En la ley romana un testamento se certificaba con siete testigos que estampaban sus respectivos sellos para garantizar la autenticidad del documento y garantizar el secreto de dicho testamento. Se han encontrado manuscritos tanto griegos como romanos de estos documentos legales que testifican de esta práctica.
    Cuando terminaban de escribir el rollo se ataba con cuerdas delgadas de cáñamo (guitas) y se sellaban los nudos. Solo se podía abrir cuando los siete testigos o representantes legales estaban presentes. La persona que poseía el instrumento para sellar tenía autoridad sobre aquello que había sellado.

Dicha autoridad era señal de propiedad, protección y aprobación, temas que predominan en Apocalipsis (7:3-5,8; 9:4) El libro sellado con siete sellos pertenece a Dios y sólo el Cordero es digno de romper los sellos y revelar su contenido (Ap 5,6; 8:1).
Estos simbolismos de hábitos antiguos hebreos muestran que el Señor Jesucristo es el que puede tomar posesión de la tierra como su herencia o propiedad. Es el cumplimiento de la parábola de Lucas 19:12 cuando “Dijo, pues: Un hombre noble se fue a un país lejano, para recibir un reino y volver”. Ninguno otro podía abrir el libro, ni de mirarlo y ese rollo representa la escritura de la tierra que Jesús, en el tiempo del fin tomará posesión de ella.

1 Véase A. T. Robertson, A Grammar of the Greek New Testament in the Light of Historical Research (Nashville: Broadman, 1934), p. 606: Thomas, Revelation 1–7, p. 380 n. 24.


© 2023 La Biblia Continental. Todos los derechos reservados. Diseñado por Creating Destiny Graphics. Biblia Reina Valera 1960 y El texto bíblico ha sido tomado de la versión Reina-Valera © 1960 Sociedades Bíblicas en América Latina; © renovado 1988 Sociedades Bíblicas Unidas. Utilizado con permiso. Reina-Valera 1960® es una marca registrada de American Bible Society, por lo cual se puede usar solamente bajo licencia.